Lo prometido es deuda, aquí os dejamos la segunda parte con otras 13 sutilezas que no debes dejar de lado y que indican cuando la chica que tienes delante es más receptiva a tus bondades. Todo tras el salto! ¿Te perdíste la PARTE 1?
13. Cambia su tono de voz
Da igual que con sus familiares y amigas gruña como un camionero de Despeñaperros. Si el chico que tiene delante le gusta, su timbre se volverá aflautado, hiperfemenino, aniñado, seductor. No habla ella, habla su serotonina. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
14. Te compara con un famoso
Conviene advertir que hay famosos y famosos. No es lo mismo que diga “te pareces a Brad Pitt” que “te pareces a Paquirrín”. Corrijamos, entonces, este decimocuarto indicio: te compara con un sex symbol. © 'Con derecho a roce' (2011)
15. Se toca el pelo
Esto lo hacen todas (salvo las calvas, quiero y no puedo). © Getty Images
16. Se acerca a ti para hablar
Hay un ruido espantoso en este pub. No la oyes. “¿Cómo dices?”, preguntas. Ella se acerca a ti y repite su frase. Lo de menos es lo que diga. Lo importante es que se te acerca. Así se produce el tradicional intercambio de feromonas. © 'Con derecho a roce' (2011)
17. Intenta abordar temas de tu interés
Si siente algo por ti, querrá comunicarse contigo: escucharte y, sobre todo, que la escuches. Y si para ello tiene que tocar temas tan ajenos a su mundo interior como el Lamborghini Sesto Elemento, la penúltima edición de “StarCraft II” o si lo de Cristiano Ronaldo fue falta o penalty... pues los toca. El caso es hablar por los codos hasta que el primer beso rompa esta insoportable tensión sexual no resuelta. No permitas que gaste más saliva: éntrale. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
18. Te toca
En una mano. En un brazo. En un dedo. En una rodilla. En un muslo. En un hombro. En el cuello. Da igual. Pero te toca. Y repetidas veces. Porque no puede evitarlo. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
19. Está rodeada de chicos y sólo habla contigo
Interior, noche. Cualquier discotecón ibérico después de las 4 de la mañana: un bosque de penes. Y todos buscan lo mismo. Ella podría estar con cualquiera de ellos (ejem, de hecho, puede que haya estado con unos cuantos). Pero aquí está, a tu vera, compartiendo contigo un tanque de garrafón con Coca-Cola. ¿Aún necesitas más pruebas de que le gustas? Pues sigamos. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
20. “¿Quieres probar un poco?”
En un momento dado, te ofrece su copa. El mensaje es cristalino: “no me importaría intercambiar fluidos contigo... ¿empezamos por la saliva?”. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
21. Te pregunta sibilinamente por una hipotética novia
En función del grado de descaro de la interesada, la pregunta puede ir desde un “¿Y tu novia que opina de todo esto?” hasta “¿Vives solo?”. Tu respuesta será siempre la misma: “Estoy soltero y entero”. Aunque tengas dos esposas y cuatro churumbeles. © 'Con derecho a roce' (2011)
22. Arquea las cejas
Digas lo que digas, ella crispa sus cejas en expresión impulsiva de asombro. Da igual que de tu boca sólo salgan perogrulladas, la angelita se maravilla como si le hubieses descubierto la existencia de la pólvora: ¡¿”De verdad”?!, exclama mientras levanta tanto las cejas que se le juntan con el moño. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
23. Se quita algo más que el abrigo
El significado de este punto está directamente relacionado con el calor que haga en el lugar donde estéis y con la cantidad de ropa que lleve la individua en cuestión. Pero pongamos un caso medio: se quita la rebequita o el jersey, dejando a la vista una ajustado top de tirantes con un generoso escote. Sí, lo ha hecho para que veas que está bien dotada y no puedas resistirte a sus curvilíneos encantos. Pero, por el amor de Dios, ¡mírale a la cara! © 'Con derecho a roce' (2011)
24. Sonríe de oreja a oreja
Aunque a vuestro alrededor el mundo se caiga a pedazos, hay algo en ti que la pone contenta. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
25. Tarda una eternidad en volver del servicio
Tic tac, tic tac. Hace ya un buen rato que está en el baño. ¿Se habrá ido por la puerta de atrás? ¿Cuánto puede tardar una chica en hacer aguas menores? Cronometremos: entra, se mira al espejo, se sube la falda, se baja la braguita, se sienta (...) se levanta, se recompone la ropa, sale y se lava las manitas. Se mira al espejo, se retoca, se empolva, se revisa y sale. Total: 5 minutos, aproximadamente. Si tarda más de 10... es una impepinable señal de que está acicalándose a fondo y rumiando cómo puede seducirte sin parecer desesperada. Ahora, ya sabes lo que tienes que hacer en cuanto vuelva del baño. © 'Con derecho a roce' (Will Gluck, 2011)
FIN DE LA PARTE 2 ¿Te perdíste la PARTE 1? ¿Te ha gustado el artículo? LIKE!














No hay comentarios:
Publicar un comentario